Aquesta llegenda va tenir certa fortuna en la historiografia romàntica i ha donat peu a vincular, sense que tampoc compti amb cap fonament, aquest Bernat amb el personatge d'algunes Rondalles Mallorquines en les que el prototipus del fill bo del rei s'anomena, invariablement, així.
Aceció mas en este tiempo, que el Emperador Carlos guerreava en Roselló, que en la armada que venia por mar con los mantenimientos para el exercito, y por guarda de la mar venian muchos Mallorquines que fueran echados por los Moros de las islas Baleares, y como las cosas le venian prosperas al Emperador Carlos por tierra, importunaron al Capitan de la flota, que llevasse el armada sobre Mallorca, y quiso Dios que de aquella ganaron todas, y sometieron al señorio del Emperador. Estas pertenecieron despues al Rey Bernardo nieto deste Emperador, hijo de Pipino su primogenito que fuera declarado Rey de la Italia y murió en Milan, por muerte del qual mudandose la succession fue declarado Emperador Ludovico segundo hijo, con el señorio de todas las tierras, escepto la Italia y sus islas que dexo a su nieto Bernardo, como escrive Platina en la vida del papa Leon III. y este Rey Bernardo puso por governador de Mallorca y las otras islas sus vezinas al Conde Armengol de Ampurias, y este rompio y desbarato el armada de los Moros entre Cerdaña y Corcega, y libro de su poder quinientos Christianos que se levavan cativos.
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— Pere Antoni Beuter, Segunda parte de la crónica general de España, cap. XII
↑Campaner y Fuertes, Álvaro. La Dominación Islamita en las Baleares. Palma (Mallorca): Miquel Font, editor, 1989. ISBN 84-86366-33-X. Faccimil, original de 1888. pp. 11-14
